lunes, 16 de marzo de 2009

Connected de Beny Chan: el día que Hong Kong comenzó a hacer remakes.






Beny Chan es conocido como el último artesano de la cinematografía honknonesa. Nadie planifica, ni rueda, la acción como él. Pero en sus thrillers, tremendamente comerciales, no encontramos ese punto de identidad o de experimentación que han alcanzado otros de sus contemporáneos.
Chan entiende el cine de acción a la manera clásica: con grandes dosis de adrenalina y enmarcado en un torbellino trepidante de persecuciones donde no tiene cabida la improvisación.
Sus películas rememoran el cine de acción de “otros tiempos” cuando la velocidad suministraba al espectador sus dosis necesarias de entretenimiento.
No podemos decir que Chan haya abandonado, ni por un segundo, sus objetivos iniciales de entretenimiento pero cuando Hong Kong ha tomado el camino del remake del thriller americano, es cuanto menos preocupante.
Connected mantiene al espectador pegado a la pantalla pero...¿a qué precio?



En el 2004 una nueva película en el panorama americano se estrenaba en las pantallas de todo el mundo. Cellullar narraba las peripecias de un valiente muchacho y sus esfuerzos por liberar a una mujer secuestrada que contacta con él por medio de un teléfono móvil.
Cuatro años más tarde Benny Chan, financiado en parte por la Hollywood Warner Brothers, trasladó esta historia a su Hong Kong natal, y dirigió uno de los pocos remakes con los que cuenta la cinematografía hongkonesa: Connected.
Dos años estuvo el director perfilando la historia, dos años creando los matices necesarios para que el espectador identificase la historia con su acento local y con sus virajes autóctonos. En efecto los escenarios, y la manera en la que late la ciudad, nos ubica la acción en la excolonia pero todo esto pasa a segundo plano cuando la acción se convierte en el eje de mirada cinematográfica.

La puesta en escena, milimétrica, asfixiante, trepidante... es fiel al cine que le dio la fama. No podemos poner ni un solo pero a las varias persecuciones de la película, ni a los momentos de tensión en donde Chan se maneja tan bien, pero la cinta aporta poco más.
Hasta el esquema del enredo de un personaje ajeno a la trama principal, que se ve envuelto en una pesadilla que se convertirá en su gran aventura, parece sacado de las películas en las que el tanden Benny Chan y Jackie Chan lideraban las taquillas. Ahora es sustituido por un discreto Louise Koo, que experimenta cómo un perdedor puede convertirse en héroe.

Los personajes se nos perfilan muy esquemáticos pero están bien anclados en el thriller, algunos rayan la caricatura, como el malvado que interpreta Liu Ye, debido a que las licencias humorísticas suelen tener cabida en los filmes de Chan.
No obstante Benny Chan no se dedica a calcar el filme original y eso es de agradecer, pero todo remake conlleva un toque de falta de originalidad. A su favor comentar que Connected no ha sido ni el primero ni el último remake, al parecer el Guardaespaldas de Pekín de Jet Li rememoraba ese otro guardaespaldas que en su día llevó a la fama a Kevin Costner.

Aún así hay algo que no se le puede negar a Chan, Connected , y el resto de su filmografía, son películas de calidad, son el trabajo de un artesano que concibe el cine de acción a la manera clásica. Calidad, entretenimiento, acción..... Nunca se debe desterrar el entretenimiento, sin ir más lejos Connected gozó de una gran aceptación de público, pero hay veces en las que éste no es suficiente. Ni siquiera me vale el argumento de que Hong Kong está pagando con la misma moneda los remakes americanos de éxitos asiáticos. Creo debemos pedir mucho más al thriller hongkonés, sin ir más lejos, un poco más de identidad.

No hay comentarios: